Impacto inmediato en la comunidad académica
El anuncio del secretario de Estado estadounidense, Marco Rubio, sobre la revocación de visas para ciertos estudiantes extranjeros ha generado preocupación entre los alumnos provenientes de China. La medida afectaría especialmente a quienes cursan estudios en áreas consideradas sensibles y a aquellos con vínculos políticos en su país de origen.
Linqin, estudiante de la Universidad Johns Hopkins que solicitó mantener su identidad parcial por seguridad, comparó esta política con “una nueva versión de la Ley de exclusión china”. Tras residir en EE.UU. durante una tercera parte de su vida, ahora evalúa la posibilidad de regresar a China.
Según datos recientes, China ocupa el segundo lugar en número de estudiantes internacionales en instituciones estadounidenses, con más de 270,000 matrículas durante el ciclo 2023-2024, lo que representa el 25% del total de extranjeros en el sistema educativo norteamericano.
Antecedentes de tensiones educativas
El tema de los intercambios académicos entre ambos países ha sido históricamente un punto de conflicto. Durante la administración Trump, el gobierno chino advirtió sobre incremento en rechazos de visas y reducción de periodos autorizados para permanecer. Además, en 2024 se registraron múltiples casos de interrogatorios en aeropuertos estadounidenses que terminaron con la repatriación de alumnos chinos.
Zou Renge, de 27 años y cursando una maestría en políticas públicas en la Universidad de Chicago, modificó sus planes originales de trabajar en proyectos humanitarios internacionales. Ahora busca empleo permanente en EE.UU. “En un entorno muy incierto, haré lo mejor que pueda para encontrarme una solución”, explicó.
Opciones alternativas emergen en Asia
El gobierno de Hong Kong ha mostrado disposición para recibir a estudiantes afectados por las políticas migratorias estadounidenses. John Lee, líder local, aseguró que la ciudad trabajaría con instituciones educativas para ofrecer apoyo a quienes enfrenten “trato injusto”. Esta postura se da en un contexto donde universidades hongkonesas como la de Ciencia y Tecnología ya facilitaron traslados desde Harvard tras declaraciones de Trump sobre limitar estudiantes internacionales.
Desde 2022, Hong Kong implementó un programa de visas diseñado para contrarrestar la salida de profesionales tras las medidas de seguridad nacional impuestas por Pekín. Kitty Wu, consultora educativa en Hong Kong, señala que instituciones como la Universidad de Hong Kong ahora reciben mayor interés de estudiantes chinos que antes considerarían únicamente opciones estadounidenses.
Perspectivas académicas divididas
Opiniones contrastantes surgen tanto en China como en EE.UU. Zhang Qi, investigador en Beijing, considera que “Tener menos intercambios internacionales definitivamente no es bueno para el desarrollo de Estados Unidos” y sugirió que China podría beneficiarse al retener talento que antes emigraba. Por otro lado, Chen, futuro estudiante de Purdue que prefiere mantenerse anónimo, expresó decepción: “Esperaba libertad y tolerancia, Estados Unidos era conocido por su diversidad que permite a los estudiantes internacionales integrarse, pero es una pena ver este tipo de cambio”.