Desmantelamiento de red criminal en múltiples provincias
La Policía Nacional ejecutó una operación que resultó en la liberación de 23 mujeres que sufrían explotación laboral en establecimientos dedicados al cuidado de uñas. El grupo delictivo operaba en distintas localidades españolas, incluyendo Barcelona, Baleares, Sevilla y otras provincias. La acción policial concluyó con el arresto de 14 individuos, entre ellos las cuatro cabecillas de la organización.
Victimas sometidas a condiciones extremas
Entre las rescatadas se encuentran 19 ciudadanas vietnamitas y cuatro filipinas, las cuales eran sometidas a jornadas laborales superiores a diez horas diarias, siete días a la semana, sin recibir compensación económica alguna. Las víctimas estaban sometidas a un régimen de control mediante una deuda ficticia que alcanzaba hasta 20,000 euros. La presión ejercida por sus captores incluía amenazas constantes, con reportes de un intento de suicidio documentado por las autoridades.
Operativo de gran escala y medidas judiciales
El operativo involucró a más de 150 agentes y se desarrolló con la ejecución de siete registros simultáneos en establecimientos de Palma de Mallorca, Sevilla y Alicante. Como resultado, se decomisaron 79,000 euros en efectivo, cinco automóviles de lujo, joyas valoradas en 8,500 euros y documentación relacionada con las actividades ilegales. Además, se ordenó el bloqueo de 291,000 euros en cuentas financieras asociadas a los responsables.
Tráfico de personas desde Asia hasta Europa
El esquema criminal incluía un complejo sistema de traslado de víctimas desde Asia hasta Europa. Las mujeres eran reclutadas con falsas promesas de empleo, trasladadas a Hungría donde obtenían documentación fraudulenta, y posteriormente conducidas por tierra hasta España. Una vez en territorio español, se les asignaba vivienda bajo supervisión y eran obligadas a trabajar en salones de manicura propiedad de la organización.
Control total mediante estrategias engañosas
Para mantener el dominio sobre las víctimas, la red criminal implementaba diversas tácticas. Una de ellas consistía en inscribirlas en academias de idiomas para obtener permisos de estancia por estudios, aunque las mujeres nunca asistían a las clases. Los responsables justificaban la falta de salario alegando que debían cubrir el costo del traslado, generando una deuda que las mantenía en situación de esclavitud moderna.
Ampliación de investigaciones y acciones legales
Actualmente, las autoridades continúan con las investigaciones para identificar nuevas víctimas y posibles conexiones internacionales de la red. La operación forma parte de los esfuerzos en la lucha contra la trata de personas y la explotación laboral en sectores donde las condiciones precarias favorecen la ocultación de delitos graves. Una de las principales detenidas ya fue ingresada en prisión provisional por orden judicial.
