Un tribunal especializado en casos de alto riesgo de Guatemala emitió una sentencia de 40 años de prisión contra tres antiguos integrantes de las Patrullas de Autodefensa Civil (PAC) por delitos de lesa humanidad. Los hechos ocurrieron durante la guerra civil guatemalteca (1960-1996), específicamente en los años 80, cuando sometieron a mujeres de la etnia Achí mediante violencia sexual y física.
Abusos como táctica de guerra
Según informó el medio local La Hora, los condenados utilizaron la violación y otros tipos de violencia contra las mujeres como estrategia de control para impedir su vinculación con organizaciones insurgentes. La Fiscalía del país presentó pruebas que incluyen testimonios de víctimas, muchos de los cuales corresponden a menores de edad en el momento de los hechos.
Proceso judicial prolongado
Las denuncias por estos crímenes se presentaron inicialmente en 2011, pero el primer juicio relacionado con este caso comenzó recién el 6 de enero de 2022. En esa fecha se dictó sentencia contra cinco exmilitares acusados de violar sistemáticamente a 36 mujeres pertenecientes a la comunidad Achí.
Impacto en la justicia transicional
Esta nueva condena refuerza los esfuerzos judiciales en Guatemala para sancionar violaciones a derechos humanos durante el conflicto armado. El caso forma parte de un conjunto más amplio de investigaciones sobre el uso de violencia sexual como arma de guerra, donde aproximadamente un tercio de las víctimas identificadas eran adolescentes o niñas cuando ocurrieron los hechos.