Un problema de salud con nuevo nombre
La Enfermedad Hepática Metabólica, ahora denominada MASLD (esteatosis hepática asociada a disfunción metabólica), impacta a una gran proporción de la población mundial sin que muchos sean conscientes de ello. Antes conocida como hígado graso no alcohólico, esta condición requiere atención médica oportuna para evitar consecuencias graves.
Prevalencia en México
Estudios indican que entre el 15% y 45% de los mexicanos conviven con esta enfermedad, siendo más frecuente en hombres, aunque también afecta a mujeres y menores de edad. Su incidencia aumenta considerablemente en personas con sobrepeso u obesidad, llegando a afectar al 75% de los casos con exceso de peso y más del 90% en personas obesas.
Factores de riesgo
La condición está directamente vinculada al síndrome metabólico, con factores como:
- Exceso de peso corporal
- Niveles elevados de colesterol y triglicéridos
- Hipertensión arterial
- Diabetes tipo 2
Además, se relaciona con 2 de cada 3 personas que tienen diabetes tipo 2, incrementando el riesgo de enfermedades cardiovasculares, renales y ciertos tipos de cáncer.
Consecuencias potenciales
En etapas iniciales, la enfermedad no presenta síntomas evidentes, pero puede evolucionar a una forma más severa llamada MASH, caracterizada por inflamación hepática. Esta progresión puede derivar en:
- Fibrosis
- Cirrosis
- Cáncer de hígado
Según estadísticas del INEGI, en el año anterior las enfermedades hepáticas se posicionaron como la cuarta causa de fallecimiento en México, destacando la importancia de su prevención y diagnóstico temprano.
Detección y tratamiento
El diagnóstico suele ser casual mediante análisis de sangre o estudios de imagen. Recientemente, la Asociación Americana de Diabetes publicó una guía con el primer tratamiento farmacológico aprobado para casos con fibrosis, lo cual representa un avance significativo para pacientes en etapas avanzadas.
Para personas con diabetes, aunque no existen medicamentos específicos para MASLD, se recomiendan tratamientos que ofrezcan beneficios metabólicos adicionales.
Medidas preventivas
Existen acciones fundamentales para prevenir o revertir la enfermedad:
- Reducción del peso corporal entre un 7% y 10%
- Alimentación equilibrada con vegetales, frutas frescas y proteínas magras
- Ejercicio diario de al menos 30 minutos
- Evitar el consumo de alcohol
- Chequeos médicos regulares, especialmente para personas con factores de riesgo
“Tu hígado trabaja todos los días para ti. Cuídalo hoy para que te siga cuidando mañana.”