En un tribunal de Nueva York, el ex productor cinematográfico Harvey Weinstein enfrentó un veredicto parcial en su nuevo proceso legal por acusaciones de naturaleza sexual. La decisión judicial marcó un momento significativo tanto para las denunciantes como para el acusado, aunque no se logró resolver completamente el caso.
Condena por un delito, absolución en otro y deliberaciones pendientes
El tribunal determinó que Weinstein era responsable de someter a una persona a un acto sexual ilegal en 2006, pero se le declaró no culpable de un cargo similar vinculado al mismo año. Sobre un tercer caso referente a una violación en 2013, los miembros del jurado aún no lograron un acuerdo definitivo.
El fallo representa una nueva fase en un caso que cobró relevancia durante el auge del movimiento #MeToo. La sentencia original del ex productor había sido anulada el año previo, lo que motivó un nuevo juicio en el mismo juzgado de Manhattan.
Problemas internos en el jurado
Las deliberaciones se vieron interrumpidas por tensiones entre los integrantes del jurado, mayoritariamente conformado por mujeres. El coordinador del grupo expresó preocupaciones sobre su seguridad personal, aludiendo a comentarios intimidatorios por parte de otros jurados, como frases del tipo ‘Te veré afuera algún día’.
El defensor de Weinstein, Arthur Aidala, denunció que las garantías para el jurado no eran suficientes y solicitó la nulidad del juicio, pero la fiscalía, representada por Matthew Colangelo, argumentó que el líder simplemente mostraba resistencia a modificar su posición, algo común durante procesos de deliberación.
Testimonios y dinámica del proceso legal
Los integrantes del jurado reanudaron las deliberaciones revisando el testimonio de Jessica Mann, quien acusó a Weinstein de violarla en una habitación de hotel en Manhattan hace una década. El grupo había solicitado con anterioridad escuchar nuevamente partes del relato de Mann.
El ex productor, de 73 años, niega categóricamente cualquier acto de violencia sexual. Sus abogados sostienen que las acusaciones son infundadas y que las presuntas víctimas tuvieron relaciones consensuales con Weinstein con el objetivo de obtener beneficios profesionales.
