Los mercados financieros internacionales sufrieron una fuerte caída este viernes 13 de junio, motivada por los ataques preventivos de Israel contra infraestructura nuclear en Irán. El temor a una escalada militar en una zona estratégica para el abastecimiento energético mundial generó una marcada aversión al riesgo entre inversionistas.
Descensos generalizados en Wall Street
Las bolsas estadounidenses abrieron con pérdidas significativas, destacando el Dow Jones con una caída del 0.91%, mientras que el S&P 500 retrocedió 0.41% y el Nasdaq perdió 0.40%. Esta volatilidad refleja la preocupación por posibles consecuencias geopolíticas derivadas del ataque, que según reportes causó bajas en altos mandos militares iraníes.
Reacción de líderes y mercados globales
Donald Trump instó a Irán a reconsiderar un nuevo acuerdo nuclear
en declaraciones públicas emitidas después del ataque. En Europa, el DAX de Alemania cayó 1.26%, el CAC 40 de Francia perdió 1.19%, el FTSE británico descendió 0.16% y el IBEX español retrocedió 1.51%. La BMV en México también mostró signos de nerviosismo, con su índice principal bajando 0.68% y el FTSE-BIVA perdiendo 0.57%.
Alzas en precios energéticos
Contrario a las caídas bursátiles, el mercado petrolero experimentó un repunte. El West Texas Intermediate (WTI) subió 7.17% hasta alcanzar los 72.92 dólares por barril, mientras que el Brent avanzó 7.04% cotizándose en 74.24 dólares. Los analistas atribuyen estos incrementos a temores sobre posibles interrupciones en el flujo de crudo si el conflicto se agrava.
Contexto previo y perspectivas
El inicio de semana había mostrado cierta estabilidad financiera gracias a indicadores de inflación menores a los esperado y avances en diálogos comerciales entre Estados Unidos y China. Sin embargo, la situación en Oriente Medio modificó drásticamente el escenario, provocando una reasignación de capitales hacia activos considerados seguros.